08 agosto, 2006

Órdenes colaterales


Órdenes...
como leyes naturales,
como imperios y redes...

Órdenes...
carreras de cuádrigas,
afilados látigos...

Órdenes...
alarmas amparan,
lentes en vigilia...

Órdenes...
fabricando orden
(y desorden, hombre...)

Órdenes...¡ÓRDEN!:
diferencial de densidades,
poso exigiendo papeles
y olvidando el respeto,
amenazando al pícaro,
condenando sus vísceras,
¡kamikazes incoherentes
por y para la orden!

¡A LA ORDEN!
¿Quién la encontró?
¿te acechó la sal?
¿perdiste algún sentido?
Porque quizá quiera volver,
digo... ¿ego?
Se lo llevó,
sí...¡la orden!
¿quién si no?

Ella,
tan sensata y medida,
tan grande y competente,
perspicaz,mecanizada,
más que segura, es cárcel...

Órden
entre órdenes.

Órden,
poesías bélicas:
presos y garantías,
plazos y tratamientos.

Alguien escapó.
Gritó al mar...
¡órden!
Éste arrastró lágrimas,
sueños abandonados,
la libertad sola
como tantas olas,
como el comienzo
y el final: ÓRDEN.

La órden,
sinónimo de autoridad,
desquicio de ambiciones,
y el deambular de presos
bajo fronteras de odio,
sobre el llanto de esperanzas.

1 comentario:

  1. A VER JOSITO COMO KIERES KE COMENTE ESTO, SI ESTO NO SE PUEDE COMENTAR ES INCOMENTABLEMENTE INCOMENTABLE DE LO BUENO KE ES, SI ES KE HASTA TU MISMO TE COMENTAS SOLO. SIMPLEMENTE, HAY KE LEERLO Y YA ESTÁ. TE VEO ALGÚN DÍA.

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